• Fija un horario para las comidas: Esta rutina le ayudará a saber que es la hora de comer y no de hacer otra cosa.
• Permíteles participar: Déjales cubiertos adecuados a su edad y cuando sean más mayores, invítalos a participar en la preparación de las comidas, la elaboración de menús y en las compras de alimentos.
• Para introducir nuevos sabores y texturas intenta crear un ambiente positivo: Realiza platos atractivos y divertidos, con colores e incluso formas: algo de alegría viene bien para motivar el apetito.
• Menús variados para estimular su paladar: Cuantos más alimentos conozca en la primera etapa de su vida, menos le costará adaptarse.
• Déjalos comer hasta que deseen (siempre con moderación): Di tiene apetito comerán más y cuando ya no lo tenga, dejará de hacerlo. De esta manera, podrás poco a poco introducirle saludables hábitos alimenticios, considerando primordialmente que hora de la comida, así como la misma, es algo gratificante y disfrutable, sobre todo si es en familia.